Por Ramón Zabala
El 11 de septiembre del 2001 el mundo fue sorprendido con la noticia del atentado terrorista que en solo 20 minutos hecho' abajo las famosas Torres Gemelas, situada en el condado de Manhattan del Estado de New York
Estados Unidos de Norteamérica.
La sorpresa no se hizo esperar y rápidamente los aparatos de inteligencia Occidentales descubrieron que se trataba de una organización terrorista llamada Alquaeda dirigida por un poderoso hombre de negocios de Arabia Saudita llamado Osama Bien Laden declarado enemigo de EEUU, de la civilización Occidental Y el mismo estaba escondido en Afganistán. por tanto La preparación de una intervención militar unilateral de los Estados Unidos no se hizo esperar y todos lo cañones se dirigieron contra esa nación tribal, pobre y atrasada. Diciendo al mundo que desde ese país un grupo terrorista infiltró la seguridad aérea del la nación más poderosa de la tierra, secuestró 4 aviones y los dirigió exitosamente a los objetivos trazados.
De manera que la intervención militar del 2001 en Afganistán tuvo justificado en la seguridad global por el peligro que representaba en su momento Alquaeda para para la seguridad mundial. Naturalmente el pueblo que albergaba los terroristas más temibles en la historia humana estaba ahora sometido a los designios de una potencia imperial que derrocó el gobierno peinó palmo a palmo territorio buscando aquellos desalmados, mató unos apresó otros y algunos los traslados como prisioneros de alta peligrosidad a una base militar en el Caribe, con la privación de todo tipo de derecho. Con esas acciones creímos liquidados los oponentes al dominio extrangero en Afganistán.
Ahora 20 años después, resulta que los dispersos terroristas Talibanes entran triunfal a Kabul, hechando a patada las tropas de ocupación y los Talibanes restaurando la soberanía pérdida por la imposición de un gobierno títere del fuerzas extrangeras.
Falta que EEUU esplique como aquellos terroristas llegaron tan lejos, quien derribó el del vuelo 587 dónde murió más de un centenar de Rep.Dom.y que pasó con el Antras y los ataques a congresistas y personalidades del Estado Americano.
La verdad es que si el triunfo Taliban representa una reorganización de Alquaeda y el terrorismo que encarnó Osama Bien Laden y sus seguidores, el mundo entero debe estar atento a lo que puede suceder a partir del nuevo gobierno Afgano después de restaurada su soberanía e incetarce en la comunidad internacional como nación independiente.
Por Ramón Zabala
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